Cómo bajar de peso?

Algunos consejos que te ayudarán a despejar la pregunta "cómo bajar de peso". Si tú eres obeso, corres el riesgo de padecer diabetes, artritis, enfermedades cardíacas, derrames cerebrales y ciertos cánceres. Por lo tanto, perder entre el 5 al 10 por ciento de tu peso corporal puede retrasar o prevenir algunas de estas enfermedades.


     Lograr estabilizarse en un peso saludable (reduciendo el exceso de grasa en el cuerpo) puede ayudarte a controlar el colesterol, la presión arterial y el azúcar en la sangre.

     La obesidad se presenta con el transcurso del tiempo, cuando se ingieren más calorías que aquellas que consumes. El equilibrio entre la ingestión de calorías y las calorías que se pierden es diferente en cada persona. El problema resulta muy complejo y heterogéneo. Los causantes pueden ser el sedentarismo (falta de actividad física), la mala alimentación (exceso de comida y/o consumo de alimentos ricos en grasas), los problemas metabólicos y la constitución genética.

     El comer en demasía, y/o no ser lo suficientemente activo físicamente, son dos factores que pueden contribuir al exceso de peso. Para conservar tu peso corporal, debes tener en cuenta que las calorías que ingieres debe ser igual a la energía que consumes. Para reducir de peso, deberás ingerir menos calorías que aquellas que consumes. He aquí un método para controlar tu peso:

• Consumir porciones más reducidas de comida
• Ingerir alimentos de bajo contenido graso y calórico
• Beber mucha agua; evitar las bebidas con azúcar
• Practicar algún deporte o ser físicamente activo

Para ampliar esta información, haz clic AQUÍ

Cómo sé si soy obeso?

¿Cómo sé si soy obeso? ¿Cómo calculo mi proporción cintura-cadera? Estas son preguntas frecuentes de quienes nos "sentimos" con algunos kilos de más.


     Para calcular tu proporción cintura-cadera procede de la siguiente manera: 1) Mide la parte más pequeña de tu cintura con un centímetro. Deja tu estómago relajado, no lo escondas mientras estés tomando esta medida. 2) Luego mide la parte más grande de tus caderas, es decir, la parte donde tus nalgas son más prominentes.

     Con las dos cifras obtenidas, divide la que corresponde a la medida de tu cintura por la medida de tus caderas. La cifra resultante es la proporción cintura-cadera de tu cuerpo.

¿Cómo sé que la cifra me indica que estoy con sobrepeso?
Es muy sencillo. Si la proporción obtenida es mayor a 1,0 para un hombre, o mayor a 0,8 para una mujer, mostrará que tu abdomen es obeso.

     Según el sitio es.wikipedia.org la palabra obeso proviene del latín obēsus, que significa "corpulento, gordo o regordete". "Ēsus" el participio pasado de "edere" (comer), con "ob" agregado a éste. Por su parte, wordreference.com es más sintético, y aclara que la palabra obeso se refiere a una "persona excesivamente gruesa".

     Encuentra más información haciendo clic en este sitio.

Como perder celulitis - parte 1

Aprender cómo perder celulitis es un proceso difícil pero gratificante. Es un problema muy complejo que padecen millones de mujeres. En algunos lugares del mundo, casi el 90% de las mujeres tienen algún grado de celulitis, en las caderas, los muslos o las nalgas.


     Es un problema cada vez mayor debido a las influencias ambientales y hormonales que son más comunes en los tiempos modernos. Sin embargo, algo no ha cambiado. La celulitis es poco atractiva y realmente puede dañar su autoestima. Esto ha dado lugar a toda una industria de productos de tratamiento de la celulitis y otros trucos diseñados para deshacerse de la celulitis. Por desgracia, la mayoría de estos productos son estafas diseñadas para quitar dinero a mujeres desesperadas.

     Si realmente quieres saber cómo perder la celulitis, es necesario encontrar las causas, en lugar de simplemente ocultarlas. La mayoría de los productos de tratamiento de la celulitis están diseñados para
enmascarar temporalmente la apariencia de la celulitis y  necesitan ser utilizados continuamente por tiempo indefinido.

     Esto puede ser una solución sencilla, pero en realidad no estás haciendo nada para resolver realmente el problema. La mayoría de las cremas contra la celulitis trabaja aumentando la circulación hacia la piel, lo que causa una leve inflamación, que puede apretar la piel en la parte superior de la celulitis. No hay un producto que pueda llegar más profundo que las capas externas de la piel. Tú no estás ayudando para nada a tu celulitis, estás simplemente cubriéndola.

     Si quieres perder celulitis, deberás eliminar la causa que la produce.

     Continuaremos con este tema en próximas entradas.

     Para mayores datos, visita esta página.

Tratamiento de la celulitis

La celulitis suele desaparecer en menos de una semana luego de haber sido tratada con antibióticos. En casos más serios, su desaparición puede llevar varios meses de tratamiento.


     Los antibióticos se administran por vía oral durante unos diez días cuando se trata de una infección leve. Suelen recetarse antiinflamatorios o antipiréticos, y se recomienda reposo y colocar la zona afectada en altura.

     El control médico debe ser periódico porque si los antibióticos no funcionan o si el paciente tiene fiebre, deben administrarse antibióticos por vía intravenosa. En los casos que la infección desarrolle un absceso, deberá realizarse una incisión quirúrgica para drenar el pus.

     En próximas entradas nos referiremos a los distintos tipos de tratamientos médicos, quirúrgticos y fisiátricos que se llevan a cabo en la actualidad con resultados aceptables, tales como:

• la mesoterapia;
• el drenaje linfático;
• la electrólisis;
• el ultrasonido;
• determinadas cremas;
• y la lipoaspiración.

     Más adelante nos referiremos a dietas específicas que se recomiendan y ayudan a combatir la celulitis.

     Encuentra más información sobre cómo eliminar la celulitis haciendo clic aquí.

Otras causas de la celulitis

Debes conocer que existen otras causas de la celulitis...
¿Sabías que la celulitis puede producirse por bacterias? Especialistas médicos afirman que la celulitis se debe a la entrada de ciertos tipos de bacterias que entran cuando la piel se rompe, como por ejemplo: a través de una picadura de un insecto, una mordedura de algún animal, por eccema, pie de atleta, prurito, por una cirugía reciente, por quemadura, por sarpullidos, y también por alguna herida sin desinfectar.


     Las zonas más atacadas por estas bacterias son las más desprotegidas de nuestro cuerpo: la cara, los brazos, las piernas.

     Las bacterias en cuestión suelen ser:

• Stafilococus Aureus.
• Haemophilus influenzae.
• Streptococcus pneumoniae.
• Streptococcus del grupo B que han pasado por hemólisis (destrucción de los glóbulos rojos)

Síntomas y diagnóstico
Generalmente, la celulitis se reconoce por enrojecimiento, inflamación, calor y dolor en la zona afectada. Esta inflamación tiene la característica de que puede extenderse rápidamente, en cuestión de horas, o puede demorar varios días en desarrollarse. También pueden aparecer dolores de cabeza y fiebre.

El diagnóstico lo realiza un médico clínico. Los cultivos de sangre no siempre identifican al organismo agresor causante de la celulitis. Normalmente sólo dan positivo en los casos que el paciente desarolla una sepsis (infección del torrente sanguíneo).

En próximas entradas nos referiremos al tratamiento, a los factores de riesgo y a la prevención.

Busca más información haciendo clic aquí

Celulitis, sus causas

Hay muchas afirmaciones sobre las causas de la celulitis. Internet está llena de rumores y cuentos con historia. Algunas de las causas más comunes de la llamada celulitis son: la mala circulación, retención de líquidos, tipos especiales de grasa, etcétera. Hay todo un mercado de productos para el tratamiento de la celulitis, a pesar de que, generalmente, son inadecuados.


     En realidad, la celulitis puede ser causada por varios elementos. La mayoría de los productos anticelulíticos que hay en el mercado no hacen nada para reducirla, y están destinados a cubrir sólo los síntomas. Con el fin de deshacerse de la celulitis, es necesario eliminar la causa del problema, sin embargo ésta no es lo que la mayoría de la gente piensa.

     La verdad es que la celulitis es como cualquier otra grasa del cuerpo. No es un tipo especial de almacenamiento de grasa, retención excesiva de agua, mala circulación, o cualquier otra cosa. Se ha demostrado científicamente que la celulitis es exactamente la misma grasa que la grasa corporal normal. El aspecto de requesón con hoyuelos, se debe a la grasa que sobresale del tejido conectivo debajo de la piel, causando abultamiento, grumos y hoyuelos, como el relleno de un colchón, dando un aspecto de cáscara de naranja a la piel en general. Es más común en las caderas, los muslos y las nalgas de la mujer. A mayor edad, más probabilidades de tener celulitis.

     No es común encontrar celulitis en los hombres, debido a que los hombres tienen una piel más gruesa, y tienden a almacenar grasa corporal en el estómago, en lugar de almacenarla en la parte inferior del cuerpo.
En la mujer, la piel de los muslos y las nalgas es más delgada que la mayoría de otros lugares en el cuerpo, lo que hace más visibles la celulitis. Los factores hormonales también causan que el tejido de la piel se rompa, y obligan a esa grasa en exceso a ubicarse en estas partes del cuerpo femenino. Las mujeres que usan anticonceptivos o están embarazadas tienden a desarrollar celulitis más rápido que otras.

     Las principales causas de la celulitis son la genética, las hormonas, los tipos específicos de alimentos, la falta de métodos apropiados de ejercicio, entre otros. Todos ellos están relacionados, y por lo general se centran en torno a las influencias hormonales.

     La razón por la cual la celulitis es más común ahora que antes, es porque hay un montón de influencias hormonales incompatibles. En el mundo moderno, las mujeres son fácilmente sometidas a factores ambientales que conducen a un desequilibrio en las hormonas que causan la celulitis. Estas hormonas dañinas descomponen el colágeno y aumentan el almacenamiento de grasa en los muslos y las nalgas. Esta combinación hace que la celulitis sea muy visible.

     Con el fin de luchar contra estas adversidades, es necesario hacer cambios específicos en tu vida cotidiana. Ejercicios acompañados por una dieta determinada pueden reducir las hormonas dañinas y obligar a tu cuerpo a luchar contra la celulitis. Al mismo tiempo, también se endurecerán y tonificarán la piel y los músculos alrededor de la celulitis, lo que la hará mucho menos visible, ¡para siempre!

     Aunque no hay una sola causa de la celulitis, sabemos que tú puedes controlar y reducir el problema de la celulitis atacando las causas conocidas que la provocan.

     Para más información haz clic aquí

Dieta para bajar de peso

Lograr una dieta balanceada, moderada, será el objetivo primordial de quien está buscando bajar de peso. Esto comprende una ingesta de cinco a seis raciones de comida, acompañada -siempre- de actividad física controlada.


     Con respecto a elegir una dieta, éstas pueden ser normo, híper o hipocalóricas, según la conformación física de la persona. Así, será indicada una dieta "normo" a las personas que se encuentran en su peso. Una dieta "hipercalórica" si la persona es extremadamente delgada; y una dieta "hipocalórica" cuando aquélla tiene exceso de peso, aunque ésta última debe comer en forma moderada y realizar actividad física, como mínimo una media hora diaria.

     Solemos escuchar por allí que "se debe comer menos" o "debemos restringir" tal o cual comida. Esto no debe ser así, puesto que se corre el riesgo de que la persona se sienta débil y cansada, quizás deje de perder peso en un período y luego lo recobra llegando a superar el peso que registró al iniciar la dieta. Las dietas restrictivas no son la panacea, ya que el metabolismo corporal "se defiende" bajando su capacidad de
generar calor en el organismo debido a las reacciones metabólicas, fenómeno conocido como "termogénesis".

     Un efecto similar lo producen las dietas hiperproteicas o hipergrasas. Por el llenado de los depósitos de glucógeno hepático y muscular, la persona comienza a perder mucha agua y fibra muscular, rebaja de peso pero lo recupera muy fácilmente. Otro efecto nocivo se trata de que si esta dieta se prolonga en el tiempo, a la persona le costará mucho más bajar de peso, además, se elevarán los registros de triglicéridos y colesterol, aún si se trata de personas jóvenes.

     La ingesta de -como mínimo- entre 50 a 100 gramos de azúcares por gramo de proteína es muy importante. Si por el contrario se ingieren grandes cantidades de proteínas sin carbohidratos, se perderá parte de esa proteína. Lo ideal es que cada dieta sea elaborada de manera individual y bajo supervisión profesional, así como también, el plan de actividad física debe ser adecuado a cada persona.

     Para ampliar esta información, haz clic aquí.

¿Qué causa la obesidad?

Para conocer más sobre la obesidad y para poder enfrentar y combatir el exceso de grasa en nuestro cuerpo debemos, primero, saber cuáles son las causas que lo originan.

Los factores que provocan la obesidad pueden ser de origen:
a) genético (hereditario);
b) por el estilo de vida (el sedentarismo y la falta de ejercicios pueden ser desencadenantes de esta patología);
c) el hipotiroidismo (aunque poco frecuente, la disminución de la hormona tiroidea puede ser causante del exceso de peso);
d) las alteraciones del hipotálamo (que pueden provocar alteraciones en los centros reguladores de la saciedad);
e) el sindrome de Cushing, representado por un aumento de la producción de cortisol (hormona elaborada por la corteza suprarrenal que ayuda al cuerpo a usar la glucosa, la proteína y las grasas. Es un tipo de hormona glucocorticoide);
f) el insulinoma, poco probable, pero si surge un tumor productor de insulina puede provocar obesidad. Los insulinomas son tumores poco comunes y ocurren generalmente como tumores únicos y pequeños en los adultos);
g) en el hombre, hipogonadismo: un aumento del tejido adiposo causado por la disminución de la hormona testosterona;
h) el sindrome de ovario poliquístico: en la mujer joven, preferentemente. Puede aparecer asociado a irregularidades menstruales, hirusitismo (virilación en mujeres), resistencia insulínica (*) y acné;
i) algunas enfermedades cardiovasculares, pulmonares y también algunos cánceres pueden ser causantes de la obesidad.

(*) La resistencia a la insulina frecuentemente va a acompañada de otros problemas de salud tales como la diabetes, el colesterol alto, la presión sanguínea alta y el ataque al corazón.

Respondiendo al dicho popular: "cada persona es un mundo", el tratamiento para reducir la grasa en nuestro cuerpo debe ser personalizado, basado en un buen diagnóstico.

Usualmente los consejos que se prescriben para reducir nuestra grasa corporal son:
1) una dieta específica teniendo en cuenta la ingesta de alimentos y el gasto de las energías que se consumen;
2) ejercicios determinados;
3) modificar ciertos hábitos de vida;
4) tratamiento especializado según la patología diagnosticada;
5) una cirugía en ciertos casos.

Abundaremos en detalles en próximas entradas.

Si deseas más información específica de cómo eliminar la grasa corporal, visita este sitio.

Sobrepeso y obesidad

Estoy con sobrepeso, ¿es obesidad?
No, significa pesar demasiado. Una persona que tiene sobrepeso no significa, necesariamente, que sea obesa, porque su peso corporal excesivo puede estar determinado por una mayor masa muscular, mayor volumen óseo, y/o por la cantidad de agua y grasa en el cuerpo.

¿Qué es la obesidad?
Obesidad, en cambio, significa tener un exceso de masa adiposa en el cuerpo, no de tejido muscular. Muchos especialistas definen a la obesidad teniendo en cuenta el aumento del riesgo de adquirir ciertas enfermedades crónicas que reduzcan nuestra sobrevida.

¿Cómo sé si soy obeso?
Existe un método sencillo para verificar si somos obesos o no. Se trata de conocer el índice de nuestra masa corporal (IMC), y se lo obtiene del resultado de dividir nuestro peso corporal por nuestra talla al cuadrado. La fórmula sería: Kg. / talla (m) al cuadrado. Cuando el índice de masa corporal (IMC) supera los 30 Kg./m2, ya estamos en presencia de obesidad.

Veamos un ejemplo. Una persona que mide 1,70 metros de altura y pesa 110 kilogramos, tiene un IMC de 0,38 Kg./m2., lo que se considera obesidad moderada (tipo II). (Ver tabla) Aunque este índice no es exacto -porque no indica el porcentaje de grasa del organismo- es el más utilizado para definir el "exceso de masa adiposa" y es útil para la clasificación de los riesgos. Si nuestro propósito fuera conocer la cantidad de grasa que tenemos en nuestro organismo, serán necesarias otras mediciones, tales como pliegues, densitometría (1) y RNM (resonancia nuclear magnética).


Tabla de Estado Nutricional

Estado Nutricional - Indice de Masa Corporal (IMC)
Bajo Peso: 20 o menos
Normal: 20 - 24,9
Sobrepeso: 25 - 27,5
Obesidad Leve (Tipo I): 27,6 - 29,9
Obesidad Moderada (Tipo II): 30 - 39,9
Obesidad Severa (Tipo III): 40 o más.

En los casos que debamos conocer el riesgo relativo, según el IMC, tendremos que considerar que pueden existir también algunos factores agravantes, tales como: Indice cintura-cadera elevado (hombre: 0.95, mujer: 0.85), diabetes mellitus (2), hipertensión, hiperlipidemia (3), el sexo y la edad.

En las entradas siguientes veremos los tipos de obesidad, sus causas y consecuencias, y las salidas que tenemos para enfrentar a esta patología.

Para mayor información, visita este sitio


(1) Densitometría (ósea) o absorciometría de rayos X de energía dual (DXA): técnica diagnóstica que permite medir la densidad mineral del hueso, es decir, su contenido en calcio por medio de los rayos X. Especialmente utilizada para diagnosticar la osteoporosis (patología manifestada por la pérdida gradual de calcio, disminución del grosor del hueso, inicio de su fragilidad y mayor probabilidad de quebrarse).

(2) Diabetes (o diabetis) mellitus o sacarina, la más conocida y caracterizada por un defecto en el metabolismo de los hidratos de carbono debido a una deficiencia de la hormona pancreática glucolítica o insulina.

(3) Hiperlipidemia: elevación de los niveles sanguíneos de los lípidos (colesterol y/o triglicéridos) por arriba de las cifras consideradas como "deseables" para reducir el riesgo de enfermedad coronaria.

Bajar de peso: ¿obesidad?

Quiero bajar de peso parece ser la consigna de millones de personas en el mundo. Esto es así porque estadísticamente ya se considera a la obesidad como una enfermedad pandémica mundial. La búsqueda de un tratamiento para bajar de peso se extiende por todos los países, incluso a los industrializados del primer mundo. En Latinoamérica, mientras tanto, los índices no son tan alarmantes, pero ya se equiparan a los de la desnutrición.

Las consultas para quemar grasa o perder kilos no sólo se presentan en adultos, sino cada vez en mayor medida entre niños y adolescentes. Los especialistas alertan que a mayor cantidad de horas frente al televisor, hay más probabilidades de que nuestros niños sean obesos.

Para conocer si este artículo está hablando de nosotros o de algún miembro de nuestra familia, debemos conocer primero qué es la obesidad, los distintos tipos, las causas que la provocan, sus consecuencias y riesgos, y qué podemos hacer al respecto.

También será importante saber qué es el sobrepeso y la diferencia que existe con la obesidad. Veremos qué se entiende por índice de masa corporal y el peso ideal, cómo se calcula, cuál es su clasificación y cúales son los riesgos de tener sobrepeso.

En la actualidad existe un cambio en la dieta alimenticia a nivel mundial. En la antigüedad los seres humanos consumían alimentos no elaborados, trabajaban la tierra y eran nómades, esto es, caminaban largas distancias; como resultado de ello, estaban siempre equilibrados en lo que respecta a la ingesta de alimentos y al gasto de energía.

Hoy, la abundancia nutricional y estilo de vida muy sedentario hacen que las reservas energéticas adiposas de nuestro sistema orgánico no se consuman, lo que provoca efectos adversos en nuestra salud. La vida del hombre moderno predispone al desarrollo de la obesidad, mucho más si se asocia con un factor hereditario. De allí su afán por encontrar un método para adelgazar o los adecuados consejos para bajar de peso.

Abundaremos en detalles en próximas entradas.

Para mayor información, visita este sitio